lunes, 29 de septiembre de 2014

"El arte de vencer se aprende en la derrotas"- ( S Bolivar)

SEMILLA # C 4738.

HOY APRENDO:

Un triunfador es una  persona común que adopta una actitud  básica de determinación para triunfar. Esa actitud se compone de una serie de características.
Veamos a continuación algunas de ellas.

Es confiable.
Muchos piensan que ser confiable consiste sólo en ser
sincero en lo que se hace y en lo que se dice.En realidad, confiable es alguien que asume la verdad,
incluso si esa verdad es incómoda; tiene la noción de lo que es suyo y de lo que es de los demás.

Pero ser confiable también significa saber mantener 
los compromisos. Alguien que hace promesas y no 
cumple es una persona en la cual usted deja de confiar.

Las empresas prefieren los buenos profesionales que están presentes todos los días y cumplan los plazos,
aquellos que, a pesar de ser magníficos, tienen un 
comportamiento imprevisible.

Muchos genios se reservan el derecho de ser  desorganizados, temperamentales, y quieren sacar
reglas especiales para ellos en la empresa. Creen que las organizaciones tienen la obligación de tolerar sus caprichos y excentricidades. El triunfador sabe que, a pesar de su talento, cuando trabaja en grupo tiene una función en el equipo que debe ser cumplida. Sabe que su respeto a los compromisos adquiridos, además de provocar admiración en sus compañeros, los motiva a lograr un buen trabajo.

Además, muchas veces el exceso de inteligencia puede destruir una carrera cuando una persona confía demasiado en su capacidad y no se da cuenta de que el éxito exige más que sólo talento. En muchos ocasiones una persona con menos talento,
pero con más determinación, llega más lejos. Es el caso, por ejemplo del periodista que aprende a concentrarse en el texto, del odontólogo que siempre está actualizando sus conocimientos, del empresario que aprende a respetar a sus clientes o de la secretaria que estudia inglés.

Una persona siente que perdió su confianza de sus compañeros de trabajo cuando estos comienzan a considerar que no debe ser tomado en serio porque,
aunque está en el juego, no respeta las reglas.

Otra característica de la persona confiable es la valentía. Cuando alguien se esconde o se aleja en un momento crítico, por miedo de comprometerse o de verse envuelto en determinado problema, pierde la confianza en quienes lo rodean. Con frecuencia la,
amistad exige mucho riesgo. La confianza es la gran
recompensa de saber atreverse.

El triunfador inspira confianza en todo lo que hace. Sabe que el primer compromiso es consigo mismo. Mantiene su palabra, no porque la otra persona se lo vaya a exigir; sino porque siempre da lo máximo de sí mismo.


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